La tristeza tiene muchos matices. Hay tristezas ahumadas y profundas, tristezas taimadas y crepusculares, incluso hay tristezas afiladas que nos vacían lentamente. Pero ninguno de estos matices se acerca, ni lejanamente, a la depresión. La depresión no es tristeza, la depresión vive en las profundidades, muy por debajo de la tristeza. Pues, en esencia, es un fracaso de la propia vida. Sylvia Plath.